Philip Bille: mi diseño de biochimenea

Es también la historia de una piedra rara, la esteatita. Historia de un hombre.

La esteatita, llamada también piedra ollar (en inglés: soapstone), tiene unas sorprendentes cualidades de absorción de la energía calorífica. Desde hace muchos años se usa para fabricar estufas y conductos de evacuación de humos. Calentada durante apenas unas horas posteriormente irradia el calor absorbido, calienta su entorno hasta casi 30 horas después de haber sido apagado el fuego.

El diseñador de biochimeneas Philip Bille quería aprovechar las propiedades de este raro material sobre todo la irradiación de calor tan adecuado en el caso de una biochimenea. No se limitó a unas formas convencionales o estándar. Quiso crear algo único pero también extremadamente funcional. Como resultado de su trabajo surgió la biochimenea COCOON.

Su diseño ha evolucionado paso a paso, a partir de formas ovales y esféricas. Día tras día el diseñador mejoraba su trabajo para obtener una forma que voluntariamente no quiso que fuera perfecta. Deseaba darle vida propia, evocar el origen, el infinito, y es indudablemente que este halo de misterio es lo que constituye el mayor encanto de esta biochimenea. El cuerpo de Cocoon, radiante de calor, fusiona una increíble resistencia de la piedra y la delicadeza y ligereza de una forma en plena metamorfosis de crisálida. Es la mejor prueba del talante y la sensibilidad del diseñador que comparte con los usuarios su interpretación y apreciación personal de las formas. Es como una escultura realizada a medida, única, creada individualmente para cada usuario.

imagen COCOON