Biochimeneas – opiniones

Las biochimeneas son un producto bastante nuevo y se discute mucho sobre ellas en los foros de Internet. ¿Cuáles son las preguntas más frecuentes de los internautas? Por supuesto, el tema que ocupa el primer lugar entre los más debatidos, es la comparación entre una biochimenea y una chimenea tradicional.

Los internautas empiezan por intentar comparar las biochimeneas con las chimeneas tradicionales bajo varios criterios, su funcionalidad, como se las percibe, sus efectos visuales, así como su precio. Todos quieren saber cómo es tener una biochimenea en vez de una chimenea verdadera con su leña y el agradable crepitar de la madera quemándose. Los más nostálgicos por las llamas y el fuego son los que han tenido que cambiar una casa con una gran chimenea por un apartamento donde la falta de una instalación adecuada no les permite la construcción de una chimenea clásica. Son ésos internautas los que recuerdan con gran nostalgia las chimeneas de verdad pero también son los que aportan la idea de comprar una biochimenea ya que ofrece grandes valores visuales, valores a los que suma la sencillez de su instalación y la falta de necesidad de instalación de evacuación de humos. Para muchas personas un aspecto muy importante es la posibilidad de encastrar el cuerpo de la biochimenea en el interior del hogar de la chimenea tradicional y así hacer imperceptible la diferencia. Los participantes de los foros a menudo insisten que sus invitados se resisten a creer que no tienen ante ellos una chimenea de verdad, especialmente porque los leños cerámicos hacen que visualmente no se aprecie ninguna diferencia. El hecho de que la biochimenea puede desplazarse a cualquier sitio de la casa es también una ventaja importante. Al contrario de una chimenea tradicional podemos cambiar la ubicación de la biochimenea según como decoramos el interior o incluso encastrarla en el muro o en alguno de los muebles.

Evidentemente a menudo se mencionan los altos precios y los peores rendimiento en cuanto a calefacción pero para los usuarios que añoran el “fuego en el hogar” una biochimenea es la única opción viable.